Después de lo que esta cayendo,
estamos descubriendo y nos vamos enterando, hay que tomárselo muy en serio, eso
de afiliarse a un partido político, o apoyar un proyecto político, por eso en
la SCD, creo que lo primero que tenemos que hacer es, pensárnoslo bien. La
primera necesidad que se nos debe imponer,
es el conocimiento de las condiciones reales. La adquisición de un conocimiento
profundo de cada localidad o barrio y de la percepción de los problemas de las
personas que allí viven o trabajan es uno de los objetivos previos
fundamentales.
La SCD tiene, pues, un
objetivo esencial para cada Municipio que se puede simultanear con el de la
promoción del Partido: la adquisición de un conocimiento profundo del entorno
electoral que nos interesa; el estudio de las condiciones de vida o de trabajo
de esa comunidad. Esta investigación previa es de extraordinaria utilidad para
el Partido; es la materia prima para la elaboración de nuestros programas
electorales.
Los resultados de la investigación
de los problemas concretos de cada localidad o barrio han de ser dados a
conocer. En primer lugar a los propios interesados o afectados para provocar
que, espontáneamente, surja una predisposición a la participación a la
responsabilidad social, a la integración con nosotros. El trato de pues, es más
natural.
Hasta aquí vemos que es
necesario disponer de un grupo que analice los problemas percibidos, los
clasifique y diagnostique una primera aproximación de solución. Si el Partido a
nivel provincial dispone de personas que puedan contribuir a un mejor
tratamiento de estos problemas, la documentación inicialmente elaborada debe
ser examinada por ellos para introducir un mayor rigor y eficacia. La SCD, crea
un compromiso de su parte, para desplazarse a los sitios concretos objeto de
estudios general un espíritu de solidaridad activa y transmite capacidad,
seriedad y nuevos estímulos para todos los militantes.
Si conseguimos en la SCD
formar, mesas redondas sobre los problemas concretos que preocupan a una
comunidad; que constituyen un instrumento barato y eficaz, para exponer
ordenadamente los problemas, sus implicaciones y propuestas y nuestras vías de
solución. Las mesas redondas son un excelente punto de apoyo para descubrir
nuevas personas validas y ofrecerles una vía de participación política. Las mesas
redondas constituyen también, en gran manera, una oportunidad para recibir
formación e información. En torno a las mesas redondas se pueden organizar charlas sobre aspectos humanos y sociales que
tengan una cierta repercusión sobre la sociedad en su conjunto, al tiempo que
sirvan para elevar la calidad humana de las personas, la convivencia, el
ejercicio de la libertad en todos sus aspectos, la responsabilidad social en el
trabajo, la nobleza, etcétera.
La SCD tiene que dar a
conocer las actividades que se desarrollan a las personas que viven en toda la
zona, es absolutamente necesario. La responsabilidad del grupo de prensa será,
de propaganda informando a las personas y distribuyendo notas, resúmenes, etc.,
animando a la gente a participar.
En la planificación de la expansión
de la SCD, se deben tener en cuenta otras actividades posibles de carácter
complementario, con militantes relacionados con la medicina se pueden plantear
charlas, mesas redondas y conferencias que traten por ejemplo, de cursos de
primeros auxilios, higiene, dietética, etc., enfocándolas a públicos, meta
específicos tercera edad, familia, amas de casa, etc., Otras actividades como
el arte de decoración, el deporte, la música, el canto, etc., también se pueden
plantear, otras actividades con las que vallamos ganándonos a la Sociedad y demostrándole
con hechos la finalidad de nuestro proyecto.
Las personas que se incluyan
dentro de lo que se llama “tercera edad” suponen un colectivo muy importante.
En primer lugar, porque disponen de más tiempo libre y, además, porque conocen
a otras personas y las costumbres de la zona, donde queramos empezar a sembrar
la semilla del Proyecto Político de la SCD, recuperando así la confianza del
ciudadano que ha perdido en los políticos.
Málaga 10 de Febrero del
2013
Antonio Hurtado Moya